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LA MUJER VIRTUOSA TIENE EL CARÁCTER DE DIOS


La Mujer Virtuosa tiene el Carácter de Dios

Mujer virtuosa ¿Quién la hallará? 
Su valor sobrepasa largamente al de las piedras preciosas. 
Pv. 31:10


EN UNA MUJER VIRTUOSA SE DENOTA EL CARÁCTER DE DIOS


Al haber evidencia del carácter de Dios en la mujer virtuosa tal y como observamos en Pv. 31:10 Nosotras como mujeres debemos esforzarnos por hacer la virtud el emblema de nuestras vidas.

Algunas personas de manera errónea, creen que el ideal de una mujer virtuosa en la Biblia es la de retraída, servil, y completamente casera, que nunca habla, y no se entromete en los asuntos de su esposo. Nada más lejos de la realidad. La mujer virtuosa es, excelente madre, maravillosa esposa, es muy buena consejera, y trata en lo posible de orientar a su esposo con respecto a cualquier asunto que pueda causarle problemas futuros. Al parecer, esta mujer virtuosa descrita en este pasaje bíblico era alguien con buena situación económica, gracias a la forma en la cual se administraba en todo “El corazón de su marido está en ella confiado, Y no carecerá de ganancias.” v-11.


Una madre o mujer virtuosa, es aquella que siempre busca la dirección de Dios para los asuntos de su casa, de sus negocios, y en los negocios de Dios siempre está presta. Cuando tiene que resolver alguna necesidad no se deja llevar por los impulsos, sino que medita en Cristo, a fin de conseguir escuchar claramente su voz.


Virtuosa= Virtud. Término que esencialmente denota el conjunto de cualidades intrínsecas, tales como la moralidad, la bondad, el valor que caracteriza a una persona o cosa y por lo cual adquiere renombre, excelencia o alabanza. La virtud, parece ser una energía esencial en el ejercicio de la fe. El adjetivo virtuoso que aparece en Pv. 31:10 significa hacendosa, capaz, digna.

De acuerdo a esta declaración de Pv. 31:10 vamos a considerar 3 ejemplos que nos ilustrarán esta verdad.

Podemos evidenciar una actitud virtuosa en la vida de Ana 2da. Samuel 1:6 “Y su rival la irritaba, enojándola y entristeciéndola porque Jehová no le había concedido tener hijos”

Elcana, esposo de Ana, era un hombre piadoso (obediente a Dios), aun cuando el modelo perfecto de Dios para la familia, desde el mismo principio, ha sido un esposo para una esposa “por la dureza del corazón humano” Dios permitió la poligamia. Esto ocasiono división en su hogar ya que tenía dos esposas Penina y Ana que significa Gracia.

Esta última y quien nos ocupa en este instante, era la preferida de Elcana, y la amaba más que a la otra, pero la envidia y orgullo de Penina causaba sufrimientos a Ana con una carga constante de tristeza debido a su esterilidad y el acoso de la otra esposa.

Ana no se quejaba con su esposo, con todo y que ella sabía cuánto él la amaba, no se vengaba a causa de la tribulación que esta le causaba. Por el contrario, está escrito que cada año subía a adorar a Dios junto con su esposo, y oraba y alababa y lloraba delante de Jehová su Dios. 
Fue por un momento vituperada por Elí, el Sacerdote de Dios, a causa de su falta de visión, considerándola como una impía creyendo que estaba ebria, cuando en realidad tenía rendimiento total a Dios, un quebrantamiento ante su solicitud ante Dios.

Ana era una mujer de oración, por lo tanto no debe sorprendernos hallar que su hijo Samuel fuera un gran hombre de oración. Ana no regateó con el Señor a la hora de pactar con él, si le concedía la petición de su corazón. Por el contrario, demostró su espiritualidad al ofrecer de manera voluntaria a Dios lo mejor que podía. Su primogénito. En esta actitud de Ana podemos ver claramente el carácter de desprendido de Dios, el carácter constante de la oración (orando sin desmayar) obrando en su vida para bendecir a la nación de Israel, en el caso de Samuel, ya que este hijo ofrecido sería el oído de Dios que guiaría a Israel a grandes victorias.

APLICACIÓN PARA TU VIDA HOY


No cabe duda de que Ana era una mujer piadosa y virtuosa, porque puso primero a Dios, creyó en la oración, cumplió sus votos y le dio toda la gloria a Dios. Sobre todo por su abnegación, se negó a sí misma el derecho de tener a su hijo a su lado con tal de concebirlo, tener la maravillosa experiencia de ser madre, así fuera por un lapso de solo tres años que era el tiempo de destete para entonces. Su fe es incólume, siempre orando sin desmayar por lo que cree que Dios puede hacer en su beneficio y en beneficio de la obra.


Dios espera abnegación de parte tuya, que ese hijo, esposo, trabajo no sea impedimento, tropiezo para servirle a Él, sino por el contrario, que puedas renunciar a lo que posees, a Dios lo que Dios te ha dado por su misericordia, para su gloria. Créele a Dios, “¿no te he dicho que si creyeres veras la gloria de Dios?”. CRÉELE A DIOS. Si hubiera más mujeres piadosas, virtuosas como Ana, hubiera más hombres y mujeres como Samuel.

II. Observando la vida de Rut. “No insistas que te deje, o que deje de seguirte, porque a donde vayas iré yo, y donde tú mores, moraré, Tu pueblo será mi pueblo y tú Dios mi Dios”.


¡Cuánta virtud hubo en estas palabras! Ciertamente Dios obrando a través de esta moabita. Una bella historia de amor, según podemos observar y de acuerdo a los teólogos, el amor de Cristo es reflejado a través de este pasaje, es decir que este pasaje tipifica a Cristo buscando a su esposa en medio de gentiles y judíos.


LA HISTORIA DE UNA GENTIL CASÁNDOSE CON UN JUDÍO


Tenemos que los esposos Elimelec y Noemí decidieron salir de Belén, a las tierras de Moab, al parecer por causa de la desobediencia de Israel faltó el pan, o escaseaba en aquel entonces y también por la tragedia que les embargó, pareciera que se fueron sin dirección de Dios. Al llegar a aquellas tierras, consiguieron esposas para sus hijos, pero con el fatal desenlace que mueren Elimelec y luego sus hijos, quedando Noemí y su nueras viudas y sin hijos.


Observamos asimismo, que Noemí por falta de visión sugiere a sus nueras regresar a Moab con sus dioses, a lo cual Rut se niega rotundamente. Es lógico notar en su determinación que prefería servirle al Dios de Noemí, que a sus anteriores dioses, se podría decir que logró ver la mano de Dios en la vida de estos judíos que la aceptaron en su núcleo familiar. Por todo ello podemos decir sin duda alguna que Rut en contraste con su suegra, tenía virtud-visión, toda vez que Noemí se encontraba afligida en ese momento, había fe y abnegación, un gran amor, y lo que es más, Dios guiando a esa bondadosa mujer, quien es cuadro de Cristo y su esposa.


No solamente logró obtener trabajo y comida para ambas, sino que por seguir paso a paso los consejos de su suegra, quien entonces ya había pasado los momentos de tristeza, y tenía una nueva visión, obtuvo un marido venido de la parentela de Elimelec. Aparece en el cuadro Booz, tipo de Cristo para redimirla, en virtud de que pagó su precio, por la esposa. Luego, tuvo un hijo con Booz, en este sentido, la parentela de Booz no se acabó, y no conforme a eso, a pesar de que Rut era moabita, pasó a ser un ancestro del Mesías (Mt 1.5) y de David.


APLICACIÓN PARA TU VIDA HOY

Si nos sometemos al Señor sin importar cual difícil sea la situación y le obedecemos, Él hará que salgamos adelante. ¿Cuánto estas dispuesta tu mujer, madre, esposa, hija a pagar por lo que Dios te tiene prometido? Ciertamente Rut, renunció a su familia, a su tierra, prefirió irse a una tierra desconocida, sin una real esperanza de poder rehacer su vida, pero con amor en su corazón, con gratitud para con Noemí. ¿Cuánto agradecimiento hay en tu vida para con Dios? ¿Qué somos capaces de hacer por el Señor?


De nada sirve enojarnos con Dios y echarle la culpa de nuestros errores (Noemí) Dios usó a Rut para sacar a Noemí de la desesperación y darle su bendición.

Cuando como Rut, preferimos beneficiar a otros antes que a nosotros mismos, haciendo el bien a otros, esto redundará en beneficio para nuestra vida, en todos los ámbitos, en nuestro llamado ministerial, en nuestro hogar, en nuestro trabajo dentro de la Iglesia. Y serás llamada ciertamente ¡Mujer Virtuosa! Así como Booz pagó un precio por Rut, así como Rut prefirió quedarse sin marido pero al lado de su suegra y sirviendo al Dios de Israel, y no solamente eso, sino aún morir y ser sepultada donde Noemí muriera, así tú mujer virtuosa, debes decidir pagar el precio, servirle seriamente a Dios, y a morir si es necesario por su causa, y seguramente sin lugar a dudas Dios recompensará tú sacrificio, tú decisión.

III. Podemos así mismo ver en la vida de la reina Ester como una vez más se ilustra la clara realidad de que una mujer es virtuosa en muchas formas. “Entonces entraré a ver al rey, aunque no se conforme a ley; y si perezco que perezca”

De forma providencial se escoge a Ester como reina del Imperio Persa, una joven judía criada por su primo Mardoqueo.

Aun y cuando en este libro no se menciona el nombre Dios, vemos su mano en todos los acontecimientos a favor del pueblo judío.

También vemos una estrategia por parte de Mardoqueo al recomendarle a la joven reina que no se identificara como judía.


Este libro cuenta como una nación fue rescatada de la extinción. Vemos una vez más el odio de Satanás representado en Amàn, por los judíos.

Aun cuando Ester ha sido criticada por la aparente falta de interés de la suerte de los judíos, porque vemos a un Mardoqueo, ayunando y orando y Ester tratando de hacerle cambiar de opinión. Al parecer Ester estaba más bien aislada de los asuntos reales de la corte y hacía un mes que no iba a ver al Rey. Una vez que ella se enteró de las noticias del peligro que se cernía estuvo dispuesta a cooperar con Mardoqueo, ponía en peligro su vida porque Asuero era una criatura de caprichos y podía matarla tan fácilmente como depuso a Vasti la anterior reina.


Ester decidió ponerse en manos de Dios, fue valiente esta vez, actúo virtuosamente y con mucha prudencia al presentarse ante el Rey.


Es bueno señalar que mientras Ester estuvo ignorante de lo que sucedía a su alrededor estando alejada de Mardoqueo, todo les fue mal a los judíos, pero cuando ella empezó a prestar atención a la palabra de Mardoqueo, todo resultó en bien para los judíos. No cabe duda de que se dio cuenta que la única que podía evitar el exterminio de su raza era ella, por la posición en la que se encontraba por lo que:

. Se presentó ante el rey con sus ropas reales.
· Halló gracia delante de él y por ende de Dios cuando éste extendió su cetro hacia ella.

· Logró que el rey accediera junto a Amán a participar de la cena que ella había preparado.

· A través de esta invitación logró engañar a Amán para la segunda invitación, generando en él auto confianza.
· Luego, la estocada, en la segunda invitación a cenar ella tomo textualmente las palabras que el rey le había dicho “Reina Ester, hasta la mitad de mi reino te daré, ¿Cuál es tu petición?”

· Allí le revela todo el asunto al rey, acerca de lo que se tramaba en contra de pueblo judío, de cómo este hombre de su entera confianza lo había engañado.


APLICACIÓN A TU VIDA HOY

Madre, mujer, no podemos dejar de ver la reacción sensible de Ester: ¡pidió oración! Pidió ayuda para poder tener valor y presentarse ante el rey. Se dio cuenta de que entrar a la presencia del rey podía significar su muerte, pero se presentó como para hacer la voluntad de Dios


Si te sientes débil, “diga el débil, fuerte soy”. El Señor, quiere fortalecer tu vida, pero es necesario que te sometas a Él, en sacrificio vivo, agradable. La oración y   el ayuno fortalecieron su vida para poder hacer lo que se había propuesto.


Así como Ester fue valiente al presentarse ante el rey, aun cuando no era el tiempo de hacerlo, la palabra nos recuerda que el amor echa fuera el temor, y que no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio.

Hay virtud en reconocer cuando estamos débiles, cuando no estamos haciendo la voluntad de Dios, hay virtud porque hay humildad en reconocer nuestras debilidades.


CONCLUSIÓN


Hemos evidenciado a través de estas ilustraciones bíblicas que las mujeres debemos esforzarnos en ser virtuosas, que debemos hacer de la virtud nuestra lema de vida, tal y como se declara en Proverbios 31:10 y de qué manera hacerlo.

I. Siendo piadosa, abnegada en la oración, capaz de renunciar a lo más preciado, sacrificar, tiempo para agradar a Dios. Capaz de sufrir sola, presentando a Dios nuestros problemas y ansiedades, sin crear conflictos, tal y como lo hizo Ana, a través de la oración, la entrega a Dios.

II. Dándonos nosotras mismas por causa de la obra, recordemos como Rut, con un futuro incierto fue capaz de irse a otras tierras por amor a su suegra.


III. Arriesgándonos a dar hasta nuestra propia vida si fuera posible, a fin de que la obra no muera, siga avanzando, sacrificio vivo, agradable a Dios es lo que demanda de nosotras.

PIDAMOS A DIOS QUE LA VIRTUD SEA NUESTRO EMBLEMA DE VIDA

Actualización de estado en Facebook de
De Omar Oscar Espinoza Ortiz


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